La película en la televisión retrasó la salida. Quizás también, la costumbre a esos días largos del difunto verano que algunas veces, pareciera resucitar.
Hora de la acción: 5:00 p.m. Cuando llegamos al parque Réne Lévesque la penumbra lo inundaba todo y comenzaba a quedarse solitario el lugar. Conga que nos acompañaba, gruño con ojos tristes y su hocico señaló algo en lo que no habíamos reparado: “El letrero que prohibía mezquinamente su entrada”.
!Que remedio! volvimos todos en silencio con el rabo entre las piernas y sobre la casa como una señal flotaba la luna que tenía la forma perfecta de un........ HUEVO.